Ambas recibieron la banda que las acredita como las máximas representantes del Camp de Morvedre y desvelaron el secreto mejor guardado, el color de sus vestidos
Federación Junta Fallera de Sagunto (FJFS) celebra la exaltación de las Falleras Mayores y Cortes de Honor 2025. Julia Palanca y Teresa Aparicio junto a sus respectivas cortes recibieron la banda que les acredita como las máximas representantes de las Fallas del Camp de Morvedre, durante la tarde del domingo, en el Teatro Romano de Sagunto.
El día más esperado para las catorce por fin llegó, tras tener que aplazarlo por las previsiones meteorológicas y bajo consulta de la mesa de presidentes y presidentas de las treinta comisiones durante la mañana del sábado. A pesar de ello, tanto Julia y Teresa como las Cortes de Honor disfrutaron de una tarde llena de emociones junto a sus seres queridos, sus respectivas comisiones y todos los falleros que quisieron acompañarlas en un día tan especial.
La Fallera Mayor, Teresa Aparicio, señala que “el día de ayer fue espectacular de principio a fin. Sentir el calor y el cariño de la gente fue indescriptible. Salir a la calle y ver a las Cortes de Honor tan emocionadas como nosotras es muestra de la gran complicidad que tenemos y la amistad que ha surgido entre nosotras”.
Fueron tantos los momentos especiales que vivió Teresa que no se puede quedar con uno solo. “Los momentos previos al acto con las personas de federación, la confianza que me transmitían Hugo y Darío cuando mi corazón iba a 1000 justo antes de nombrarme, salir y ver el teatro lleno de tantas caras conocidas y amigas, subir a ese escenario como Fallera Mayor, imponer las bandas a cada una de las componentes de mi corte, mi sorpresa cuando vi a mi sobrina venir hacia mí con un cojín en las manos y los ojos emocionados, la gran mantenedora que tuvimos, las visitas, los obsequios, cada mirada, cada palabra, cada detalle hicieron que ese día no lo vaya a olvidar nunca”, indica la Fallara Mayor.
Por su parte, la Fallera Mayor Infantil afirma que “desde que salí de casa de mis yayos lo viví con inmenso sentimiento, salir a la puerta, verme rodeada de mi corte en primer plano, mi familia, mis falleros marineros, muchísimas personas amigas y del mundo de las fallas junto a la música que nos acompañaba, todo esto me sacaron las primeras lágrimas tan solo al bajar el primer escalón”.
Julia tiene claro que si tuviera que quedarse con un solo momento es “cuando sonó mi nombre y me dedicaron unas pequeñas palabras que me caracterizaban a la perfección. Al escuchar por segunda vez mi nombre al completo, empezar a caminar, girar por ese camino y verme a todo el público de pie de nuestro inmenso Teatro Romano volví a llorar de felicidad. Ese momento no se me olvidará en la vida y al recordarlo o contarlo no puedo evitar que me brillen los ojos de pura emoción”. Además, la pequeña añade que “otro instante que se queda en mi corazón fue el momento en el que vi por primera vez a mi corte con sus trajes oficiales, recién estrenados, ¡iban todas guapísimas!”
El secreto mejor guardado
Por otro lado, durante este día se desveló uno de los secretos mejores guardados, el color de los trajes de ambas. Durante los días previos a esta gran cita es la quiniela más repetida, ya que adivinar el color del fondo que las Falleras Mayores eligen es todo un reto para los fanáticos de la indumentaria.
Así pues, Teresa escogió el color negro para esta ocasión, en el Lampazo ‘Alcázar’ de Compañía Valenciana de la Seda. Este traje lo complementó con manteletas de ‘Hijas de Carmen Esteve’; peinetas de Daniel Bada; cancán y ropa interior de ‘Margarita Vercher’; zapatos de ‘Calzados de Fallera Salva’ y un aderezo compuesto por varios orfebres: la joya de ‘Art Antic’, los pendientes de la joyería ‘La Perla de Manacor’ y el resto de las piezas del aderezo de Daniel Bada. La compañía ‘L’U i Dos Indumentaria Valenciana’ fue la encargada de confeccionar este traje.
Julia apostó por un gris imperial en el estrecho de seda natural ‘San Alfredo’ de ‘Vives y Mari’. Lo acompañó con manteletas de ‘Hijas de Carmen Esteve’; puntilla bordada a mano de ‘Santos Textil’; calcetines de ‘Santa Catalina’; cancán y ropa interior de ‘Margarita Vercher’; zapatos de ‘Calzados de Fallera Salva’; peinetas de ‘Més que pintes’ y el aderezo de ‘Art Antic’, pieza que llevó su madre cuando fue FMI en 1992 de su falla, la falla La Marina. El cosido de este traje recayó en manos de ‘Kathy Soto Indumentaria’.