Tan difícil como injusto resulta resumir en estas escasas líneas la vida de Jesús Barrachina Luna y todo lo que ha aportado a la ciudad de Valencia.
Complicada labor también la de destacar sus múltiples virtudes y su carácter especial. Jesús te envolvía con su marcada personalidad, siempre bromista, cercano y cariñoso con todo aquél con quien trataba.